País de ciegos, sordos y mudos.

Me lleva la chinita, no sólo la chinita, la chinota y su madre, su abuela y su tatarabuela... estoy harta de este maldito país tercermundista, lleno de desempleo y escaso de educación. Fracaso de profesionistas y frustración de intelectuales.
Eran las 13:40 hrs en plena calle, al sol y yo dentro de mi auto estacionada con los vidrios abajo para no sofocarme con tanto calor, escuchando mi música esperando dieran 13:45 para que mis hijas salieran del portón rojo de la escuela. Recargada en el asiento, viendo el cielo y relajando mi pensamiento... cuando de pronto entre el deslumbramiento del sol alcanzo a ver un joven con sudadera gris, en mi sien izquierda siento algo caliente apoyado, es una pistola y escucho decirle:

- " Deme su cartera "

Inmediatamente como reflejo y sin pensarlo ni se me ocurre voltear a verlo, solo estiro mi brazo y le paso mi bolsa, saco mi catera y le enseño abriéndola que solo traigo $200, ruego a dios que no me pida la única tarjeta de crédito que traigo.. y luego pienso, el coche! me va a quitar otra vez mi coche (hace 10 años me robaron ya uno) y entonces me dice:

- " Qué mas traes? " le contesto - " Nada, es lo único " y pienso.. mi anillo de casada, que no lo vea, mi collar (es el que me acaba de dar la mamá de Reyna como herencia suya)no, no.. que no lo vea.. que le doy?
En eso me dice, dame el celular.

Siempre lo traigo afuera de la bolsa, en el portavasos del auto junto al stéreo, por si suena y voy manejando poder responder o colgar pronto. Se lo dí sin pensarlo y salió corriendo, me quedé en shock, no se me ocurrió voltear a verlo hasta 10 segundos después, ya solo lo vi dar la vuelta a la esquina, de espaldas. De todos modos que iba a hacer? corretearlo, gritar? traia una pistola!!! había una escuela llena de niños y mis hijas saldrian en 2 minutos... no había opción, sólo dejarlo correr.

Bajé temblando del coche, fingí que no pasaba nada, le dije a la maestra lo sucedido y me dijo que me calmara y no dijera nada para no causar pánico, pregunté a otros 3 papás que por ahi estaban y típico.. nadie vio nada, ni escuchó.

Viva México, país de ciegos, sordos y mudos.

PD. Y yo me pregunto, dónde carajos están mis dos ángeles de la guarda que se supone se murieron pa cuidarme? ya ves Dios, es por eso que no te creo ni media palabra...